El equipo de transición del Presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador, habría alcanzado un acuerdo para que los solicitantes de asilo centroamericanos esperen en México mientras sus casos son revisados por tribunales de Estados Unidos.
En entrevista con el diario The Washington Post, la próxima Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, aseguró que el País habría aceptado los lineamientos del plan conocido como “Permancer en México” para los solicitantes de asilo en la frontera con Estados Unidos.
“Por ahora hemos aceptado esta política de ‘Permanecer en México”, aseguró Sánchez Cordero, señalando que esta sería una solución a corto plazo.
“La solución a mediano y largo plazo es que esas personas no migren (…) México tiene los brazos abiertos y todo, pero imagínate una caravana tras otra también sería un problema para nosotros”, aseguró.
Aunque no se ha firmado un acuerdo formal y los funcionarios estadounidenses han advertido que deben discutirse muchos detalles, el Gobierno entrante de México se mostró dispuesto a convertir su frontera en una sala de espera para el asilo en Estados Unidos.
Según el diario, el acuerdo se concretó la semana pasada en Houston durante una reunión entre Marcelo Ebrard, futuro titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México, y altos funcionarios estadounidenses, como el Secretario de Estado Mike Pompeo y el secretario de Seguridad Nacional Kirstjen Nielsen, dijeron funcionarios estadounidenses y mexicanos.
El acuerdo rompería con las normas de asilo de larga data entre países y trazaría un nuevo camino para aquellas personas, como los miembros de la caravana de centroamericanos que permanecen en Tijuana en su intento por llegar a Estados Unidos y escapar de la pobreza y violencia en sus países.
Asimismo, la nueva medida pondría fin a la política de “captura y liberación” ampliamente criticada por Trump que hasta ahora ha permitido que aquellas personas que buscan asilo esperen en suelo estadounidense durante su proceso en tribunales.
Bajo los nuevos procedimientos, los solicitantes de asilo deberán presentar una entrevista inicial para determinar si enfrentan un peligro inminente al quedarse en México.
Funcionarios de EU citados por el Post señalaron que el nuevo sistema podría procesar al menos el doble de solicitudes de asilo ya que no estarían limitados por la capacidad de sus sistemas de detención en los puertos de entrada al país.
Tan solo el puerto de entrada de San Ysidro, en el área de San Diego, acepta actualmente entre 60 y 100 solicitudes de asilo por día.