Mientras el mundo continúa resintiendo los efectos de la pandemia provocada por el Covid-19, la región de América del Norte se prepara para la entrada en vigor este 1 de julio del acuerdo comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
El pacto comercial reemplaza al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y, de acuerdo Samuel Campos, director para la zona Bajío de Newmark Knight Frank (NKF) y Kenneth Smith, ex jefe negociador de la modernización del Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos, Canadá y México, T-MEC y Socio de la firma consultora Agon, México podría aprovechar el acuerdo para atraer inversión extranjera.
Durante un encuentro virtual organizado por la Cámara Americana de Comercio (AMCHAM), los expertos afirmaron que el sector industrial mexicano reaccionará a la guerra comercial existente entre Estados Unidos y China, al Covid-19 y a la entrada en vigor del nuevo tratado.
Impulso al Comercio Exterior
La pandemia de Covid-19 reveló los puntos débiles de un modelo de distribución que dependía en gran medida de proveedores ubicados en distantes partes del globo. Las cadenas de suministro del mundo examinan ahora mecanismos que puedan garantizar el abastecimiento en caso de nuevas disrupciones. Para México, la entrada en vigor del T-Mec podría significar un aumento en sus exportaciones con Estados Unidos.
Samuel Campos apuntó que desde 2019 inició una crisis de abastecimiento debido a la guerra comercial entre Estados Unidos y China. Este conflicto provocó una disminución del 17% en las importaciones de manufacturas chinas a EU, con un monto de 90 mil millones de dólares.
Las interrupciones de suministros provenientes de China impulsaron las exportaciones de otros países asiáticos y para México que, en el mismo periodo, aumentó sus exportaciones al vecino del norte en 13 mil millones de dólares.
México podría sustituir las cadenas productivas chinas
Campos destacó que las empresas estadounidenses buscan nuevas fuentes de abastecimiento y voltean a ver a México como el sustito natural de proveeduría de China. Algunas de las ventajas para los negocios norteamericanos son:
- Reducción de costos
- Conveniencia en temas laborales
- Utilización de menos capital de trabajo
- Reducción del 75% en el tiempo de llegada de productos a sus operaciones
Modernizar el comercio internacional
Por su parte, Kenneth Smith, consideró que la entrada en vigor del T-MEC modernizará el entorno actual del comercio para la región de América del Norte, luego de permanecer 25 años sin cambios.
“Es importante que México logre convencer a Estados Unidos que gracias al T-MEC y la fortaleza que éste genera en materia de cadenas de producción en la región, nuestro país garantiza su lugar en el perímetro de la producción de América del norte y que las empresas estadounidenses, canadienses o de cualquier parte del mundo que inviertan en México no es offshoring, es nearshoring, es formar parte de esta comunidad norteamericana que va a ayudar a fortalecer la competitividad de la región”, señaló el ex jefe negociador del T-MEC.