La derecha maneja un discurso circular repitiendo incesantemente la narrativa y agregándole ciertos elementos en cada vuelta.

Sostienen que es igual de corrupto que los demás. Para demostrar su ataque llevan tiempo exigiendo que AMLO demuestre sus ingresos durante los largos años que hizo campaña, ya sea como abanderado del PRD o como constructor de MORENA. Bastaría con leer periódicos para ver que en una época el partido le pagó salario y los gastos de campaña, eso con recursos públicos denominados como prerrogativas legales que reciben los partidos políticos. Luego a partir de diversos donativos al movimiento que se convertiría en partido. El tenía ingresos por regalías y posiblemente de su esposa, pero la ley no lo obliga a informarlo.

Pero la derecha no requiere o quiere enfrentar la verdad, lo de ellos es el ataque. Luego agregan la acusación de que nunca pagó , sin demostrar nada; la ley garantiza la confidencialidad de las declaraciones de impuestos, aunque obliga a los servidores públicos a hacer declaraciones de bienes. La ley obliga a todos a declarar sus ingresos gravables y por supuesto a pagar impuestos. se puede revisar lo que AMLO poseía mientras fue jefe de de la Ciudad de . Sería bueno ver las declaraciones de impuestos de los políticos, así nos enteraríamos de sus ingresos y que hicieron con el dinero, porque la declaración de bienes está sesgada.

El nuevo agregado en esta vuela se  concentra en el dinero que recibió Pío López Obrador, y se reclama que AMLO no pagó impuestos. Aquí hay varias falacias:

1) No existe evidencia de que el dinero lo recibió López Obrador, por lo tanto no está obligado fiscalmente sobre el mismo.

2) Se supone que debemos aceptar que el contenido de la bolsa de papel es dinero, pero no hay certeza de la cantidad, con lo cual no se puede determinar si es fiscalmente gravable, elemento contable más complejo.

3) No hay certeza del destino del dinero. A la derecha no le importa averiguar a quién se le entregó el dinero, porque conocerlo es la clave sobre la obligación para reportar ese dinero incluida la responsabilidad fiscal.

4) No hay información sobre el origen del dinero, ¿era propiedad de quién lo entregó? Esa persona deberá dar las explicaciones fiscales y políticas pertinentes.

Por supuesto que la derecha no se preocupa por entrar a los detalles porque para ella es suficiente ensuciar, están casados con el principio de “difama que algo queda”. Pero callan si les planteas que 15 empresas se han negado a pagar 50,000 millones de pesos pero están gritando por supuestamente 2 millones entregados a Pío.

El esfuerzo desestabilizador de la derecha conlleva un elevado impacto boomerang potencial.

La búsqueda para debilitar al presidente buscando la deposición conlleva un elevado riesgo de inestabilidad y destrucción institucional. Si de algo se puede presumir en México es la capacidad que se tuvo para evadir los golpes de Estado durante el siglo XX y alcanzar transmisiones del poder políticas pacíficas y ordenadas. En el lenguaje vernacular mexicano, la derecha está escupiendo al cielo al esforzarse en la desestabilización del gobierno.

La guerra sucia continuada, la contaminación sistemática de la dirigida al presidente y su familia, esta afectando en general propiciando una mayor desconfianza en la política, lo que se convierte en un obstáculo mayor para las decisiones política reduciendo su efectividad, lo que debe agradar a la derecha cuyo interés en el bienestar social es inexistente.

En México la gente ya no sabe a quién creerle y es evidente que tal vez los que menos gozan de la confianza de la sociedad son los políticos y esto afecta a la sociedad, porque la desconfianza parece justificar su rebelión; la derecha está feliz promoviendo el no uso de máscaras y la oposición a las vacunas, para ellos mientras más muertos mejor, a menos que los generen ellos porque entonces lo niegan, como en la guerra de Calderón.

La derecha busca la desmovilización para que las decisiones se oligarquicen, por eso les duelen los 30 millones de votos a favor de AMLO. Parten del principio de que el miedo desmoviliza y por eso insisten en tratar de aterrorizar a la sociedad. Siguen con el petate del muerto del comunismo, del marxismo, aunque creo que nunca leyeron a Marx, porque esta prohibido por su religión, esa religión del odio, cuyo principio es aplastar a los que piensan y se ven distinto, por eso rechazan el matrimonio entre personas del mismo sexo.

Los ataques de la derecha buscan dañar a la política más allá de cualquier posibilidad de reparación creyendo que eso les abre la puerta del poder para hacer lo que hicieron cuando tuvieron la oportunidad: robar descaradamente, reforzar la desigualdad y asegurar el privilegio e impunidad.

Dejar respuesta

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí