En Estados Unidos, la Asociación de Fabricantes Estadounidenses de Combustible y Petroquímicos (AFPM) acusó ante el Presidente Donald Trump restricciones impuestas por el Gobierno de México a inversiones externas particularmente en el sector energético.
“Los informes han indicado que el Gobierno mexicano ha tomado múltiples medidas para restringir las inversiones actuales y futuras de los Estados Unidos en el mercado energético mexicano”, señala una carta emitida por el presidente del organismo, Chet Thompson y dirigida también al representante comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer, y al secretario de Estado, Mike Pompeo.
El grupo se refiere al riesgo en inversiones por retraso en permisos para el desarrollo de nueva infraestructura de transporte y almacenamiento, cancelación de permisos de importación de combustibles y regulaciones que favorecen a Pemex.
En ese contexto, el embajador de EU en México, Cristopher Landau, declaró ayer en una conferencia virtual con integrantes de la CONCAMIN, que cambiar las reglas del juego ahuyentaba la inversión e incluso (aunque después trató de recapitular), advirtió que no era el mejor momento para invertir.
“Tampoco les puedo mentir a mis connacionales y decir que es un momento propicio para invertir”, dijo Landau en el encuentro con socios de la Confederación Nacional de Cámaras Industriales.
Al ser cuestionado al respecto este viernes en conferencia de prensa matutina, el Presidente Andrés Manuel López Obrador declaró que, si bien es legal y legítima la controversia, su Administración defenderá lo que considera justo.
“Nosotros no estamos violando ningún ordenamiento legal, estamos poniendo orden porque sentimos que hubieron excesos, que hubo mucha corrupción en el sector energético, es de dominio público que empresas extranjeras y nacionales hicieron jugosos negocios al amparo del poder público, que hubo contubernio, que hubo complicidades, es el caso de Odebrecht, es el caso de la planta que se compró a precios elevadísimos de fertilizantes y muchos otros”, indicó desde Michoacán el Mandatario.
“Entonces estamos poniendo orden porque no vamos a permitir que sigan haciéndose estos negocios que permiten lucrar y afectan el interés general, la hacienda pública por esa corrupción que imperaba en la Comisión Federal de Electricidad, en Pemex se afectó mucho al pueblo de México porque toda esa corrupción se sostenía con el cobro de tarifas elevadas de energía eléctrica, el aumento constante en los precios de los combustibles, gasolinazo, el pueblo pagaba los platos rotos, entonces está poniendo orden y lo vamos a seguir haciendo desde luego respetando el marco legal, apegándonos a lo que establecen los acuerdos comerciales, el tratado, lo que se acordó en el tratado, esto es importante decirlo para que no se malinterpreten las cosas”, advirtió el tabasqueño, al tiempo que aseguró que en el el T-MEC no hay compromiso alguno sobre energía.
En ese sentido, explicó que cuando comenzaron las negociaciones para el acuerdo comercial, él era Presidente electo y se opuso a que se estableciera en el tratado un capítulo previamente aceptado por el Gobierno anterior para integrarse por completo en materia energética.
“Solo quedaron dos párrafos y en estos dos párrafos se establece que México es un país independiente en el manejo de sus recursos energéticos y en particular del petróleo”, afirmó.