¿Cree Usted que los gobiernos de Venezuela, Bolivia, Hungría o Brasil -todos populistas- tienen el bienestar de su pueblo como prioridad?
Sergey Markov, presidente del Consejo de Estudios Políticos de Moscú declaró ayer, hablando de las protestas en Rusia que el pueblo está harto no solo de los oligarcas y los problemas económicos sino también de la falta de alta tecnología y desarrollo económico de la nación.
¿Por qué es esto importante? Porque si les urge el dinero, si les urge ser “triunfadores” en un mundo que avanza más rápido que ellos, los rusos van a inventar cualquier mentira que le permita a Putin verse bien, al costo que sea, e igual a este comentario, les pregunto ¿cuántos estarían dispuestos a cambiar su auto por un automóvil soviético?, perdón, debí decir ruso pero la verdad es que Putin es cada vez más el Putin soviético que el gobernante de Rusia.
¿Sabe Usted que hay manifestaciones contra el gobierno en las calles de toda Rusia? Sabe Usted que 42% de los manifestantes en las calles el día de ayer nunca habían protestado públicamente pero el agua les está llegando al cuello, las políticas populistas, los asesinatos políticos, la persecución a los movimientos opositores que se están elevando ante el enojo del pueblo y a Putin le urge algo, así sea una vacuna falsa para presumir que su país sigue a la vanguardia de una ciencia que los dejó atrás hace por lo menos una década.
Pero no nos desviemos, la pregunta era ¿cuántos de ustedes estarían dispuestos a cambar su auto, cualquiera que tengan hoy, por uno ruso?
¿Cuántos cambiarían su reloj, su refrigerador, su computadora o cualquier otro producto tecnológico por uno de Rusia?
¿Que no conoce usted ninguno? ¡Claro que no! porque no los hay de calidad internacional. Si le digo auto chino quizás me diría usted que quiere un Nio eléctrico o un Tesla y producido en Shanghái. Seguramente su televisor es chino o quizás coreano y seguramente su computador es taiwanés y el chip es chino y ni hablar de su teléfono que además de chino, habla español entre muchos otros idiomas.
¿Por qué le pregunto todo esto? Porque para desarrollar una vacuna contra un virus en menos de 12 meses se requiere de alta tecnología, de electrónica y programación ambos campos en los que la Rusia de hoy, con 25 millones de personas viviendo ya bajo el nivel de pobreza, no tiene.
¿Por otro lado, si usted no cambiaría ni su refrigerador ni su automóvil por uno ruso porque arriesgar su vida con una vacuna que no ha pasado por las pruebas necesarias para demostrar su eficiencia y seguridad?
No voy a hablar ni de López Gatell ni de la COFEPRIS porque ninguno de ellos es serio y mucho menos científico, pero si voy a preguntar porque la vacuna soviética (¡otra vez!) ha sido “aprobada” únicamente por países tan poco reconocidos en el campo científico como Argentina, Argelia, Bielorrusia, Emiratos Árabes Unidos, Hungría, Palestina, Paraguay, Pakistán, Rusia, Serbia, Turkmenistán, Venezuela y ahora la México (COFEPRIS).
¿Por qué no la ha aprobado ningún país europeo de esos donde hay universidades, laboratorios, fábricas de medicamentos, y capitales para financiar este tipo de desarrollos donde no faltaría algún conglomerado más que dispuesto a financiar otra vacuna que se venderá por millones?
Ojo, no dudo que la vacuna rusa sea aprobada algún día (es más estoy seguro que cuando lo sea hasta Putin aceptará ponérsela – al día de ayer no lo había hecho porque “no ha sido probada en personas de su edad” (¿?) que es casualmente la edad a las que se les pondrá en México.
Tampoco dudo que haya algún acuerdo entre Rusia y México de correr pruebas de eficiencia de la vacuna en este último país, pero si ese es el caso, ¿no debería de informársele a la gente que este es el caso para que todos los interesados en participar en las pruebas lo hagan voluntariamente?
Está bien, está bien, no van a llegar más vacunas de Pfizer porque no se pagaron; las de moderna no se pidieron y las de AstraZeneca no se han pedido así que, me dirán algunos, solo queda la rusa, pero esto es tanto como decir que no hay pollos vivos, tampoco hay pollo fresco, pero hay una patita de pollo que lleva solo unos días sobre la mesa así que si tienes hambre pues come eso o aguántate y se vale si no hubiera otra opción, pero afortunadamente si las hay.
Veamos, vamos a suponer que la vacuna es solo agua con sal, no le hará daño a nadie ponérsela; es más, las brigadas de “servidores del pueblo” se cubrirán de gloria recorriendo todos los rincones del país para buscar a todos los miembros de la tercera generación para poder vacunarlos, ellos estarán felices porque ya fueron vacunados y, ¡ah sí!, y por estarlo saldrán a la calle bajarán la guardia, se enfermarán de alguna otra cosa o serán parte del supuesto 8.5% de quienes no quedan protegidos por la vacuna según el propio departamento de promoción rusa (el mismo que dice que no hay en toda esa nación otra persona capaz de reemplazar a Putin y que por lo tanto el tiene que seguir gobernando ad infinitum en este ejercicio de ‘democracia‘ a la soviet).
Segundo escenario: La vacuna no solo no es eficiente, sino que tiene algún ingrediente que genera reacciones negativas -además de no proteger al portador- y algunas personas se mueren por eso. Bueno tampoco es tan grave porque habrá quien diga que igual se iban a morir si no se vacunaban así que el resultado fue el mismo pero el costo al estado mucho menor porque no hubo que entubarlo ni llevarlo por semanas a un hospital.
Tercera opción: Nos esperamos a que la vacuna se apruebe en un país de verdad, o que se acaben las pruebas que se hagan en Tabasco y los ranchos aledaños en la zona maya y que están resulten positivas y la vacuna sea aprobada por un país donde las autoridades sanitarias, de salud y científicas estén conformadas por científicos de verdad comprometidos con la ciencia y no con su gobierno
Cuarta opción, si esperamos suficiente estarán en el mercado las vacunas de Johnson y Johnson, el Covaxin, Zycov-D o el Covishield de India, quizás hasta la de Sinopharm, Sinovac (coronaVac) o la CanSino de China o claro quizás hasta la rusa haya ya terminado estudios de verdad que demuestren su efectividad y entonces la podamos administrar sin ninguna preocupación.
Ah sí, claro, se me olvidaba que todo esto podría pasar DESPUÉS de las elecciones en México, lo cual afectaría la posibilidad de las brigadas de salir a salvar ciudadanos y entonces quizás obligaría al país a utilizar los 30,000 médicos que ya trabajan en farmacias -que no pertenecen a ningún partido político- pero que están por todos lados a aplicarla profesionalmente y con toda seguridad y responsabilidad ambos características que las famosas brigadas de tan memorable nombre (servidores del pueblo, ni más ni menos) no tienen.
En resumen, si yo tuviera un familiar de edad avanzada le sugeriría -si no tiene acceso a las vacunas de Pfizer o moderna o AstraZeneca- que se espere tantito. Que se siga cuidando, que no corra ser conejillo de Indias y se espere a que los más acelerados lo sean. Es como estar en Disneylandia al final del día, algunos corren al estacionamiento para evitar la aglomeración, otros se esperan al final y la evitan y todos salieron por igual exitosamente del parque, pero los últimos lo hicieron con mayor tranquilidad.
En este caso, ser primero no creo que sea mejor y correr a participar de un evento nacional donde los organizadores no fueron capaces ni siquiera de poner un servidor que no se cayera por “exceso de tráfico” que no pudieron prever (¿de verdad no previeron que millones iban a tratar de acceder el sitio de Internet después de las 12 horas que le llevo a la Cofepris autorizar un medicamento del que no hay pruebas suficientes para garantizar su eficiencia.?
Si la burra no era arisca, pero la hicieron.
Ah sí, ya está usted hasta el gorro del encierro, ¿verdad? Bueno déjeme recordarle que hace apenas 70 años miles de personas salieron, literalmente de closets y sótanos donde vivieron escondidos 3 y 4 años para evitar ser asesinados por los nazis y lo sobrevivieron sin teléfonos celulares, sin zoom, ni internet ni televisión, ni teléfonos, sin baño ni comida, sin Uber ni ayudantes, ni muchachas, sin saber cómo o donde estaban sus familiares, sin saber si estarían vivos mañana y lo hicieron. Así que esperar un par de meses más para esperar que lleguen vacunas de efectividad corroborada no debe ser tan tremendo ni imposible.
Si, me van a disculpar, soy paranoico. Hace muchos años, cuando salí de México dije que la corrupción si mata y que Salinas iba a ser un hiperladrón y afortunadamente este señor hizo todo lo posible para demostrar que yo tenía razón. Hace 4 años dije que Trump iba a tratar de quedarse en el poder a cualquier costo y ahora resulta que no estaba yo tan equivocado.
Quizás hoy si lo este, quizás estoy equivocado pero siguiendo la teoría de Jeff Bezos, el fundador de Amazon, quien dijo que cuando tiene que tomar una decisión que no tiene v de vuelta, una decisión importante que puede cambiar la vida de uno o de otros el siempre tiende a procrastinar y esperarse tanto como será posible para aprovechar ese tiempo para recabar tanta información como sea necesaria, para saber que está tomando la mejor decisión posible con la información disponible (If I have to take a highly consequential and irreversible decision I will wait, actually , procrastinate, until I have all the information I need) y con todo respeto, en la época de “yo tengo otros datos” la ciencia sigue siendo ciencia aunque algunos líderes duden de ella.
Dejemos que la ciencia siga su proceso, démosle unos meses a que se calmen las aguas, dejemos que pasen las elecciones y entonces tomemos la decisión de vacunarnos o no con la vacuna rusa que quizás entonces ya sirva o con alguna otra que si haya pasado las pruebas necesarias y nos garantice su eficiencia y que no nos va a enfermar más el remedio que la enfermedad.
Claro que al final del día cada quien es libre de hacer lo que mejor le parezca.
Ojalá el tiempo me demuestre que estoy equivocado y que la vacuna Sputnik V es la mejor que se ha inventado. Mientras tanto, tómese el tiempo que sea necesario.