El Director General de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el doctor Tedros Adhanom Ghebreyesus, advirtió que existe evidencia consistente de que Ómicron, la más reciente variante del virus SARS-CoV-2, se está esparciendo con una velocidad significativamente mayor que la variante Delta.

Más de 3.3 millones de personas han perdido la vida a causa del COVID-19 este año; esta cifra es mayor que las muertes ocasionadas por el VIH, la malaria y la tuberculosis juntas en 2020. La COVID-19, dijo, sigue cobrándose unas 50 mil vidas cada semana.

«Ahora hay pruebas consistentes de que Ómicron se está propagando significativamente más rápido que la variante Delta. Y es más probable que las personas que han sido vacunadas o se han recuperado de COVID-19 puedan infectarse o reinfectarse», dijo.

Alertó que el incremento de las actividades sociales durante las fiestas decembrinas, ocasionará en muchos países un alza en los casos y fallecimientos a causa de la COVID-19, así como la saturación de los sistemas sanitarios.

Dijo que la forma más rápida de volver a la normalidad será tomar decisiones difíciles para protegernos a nosotros mismos y a las demás personas.

«En algunos casos, eso significará la cancelación o el retraso de los eventos (…) Pero un evento cancelado es mejor que una vida cancelada. Es mejor cancelar ahora y celebrar después, que celebrar ahora y lamentar después», dijo.

Dijo que si el objetivo es terminar con la pandemia de COVID-19 el próximo año, el mundo deberá combatir la inequidad y asegurarse que 70% de la población de todos los países esté vacunada para el primer semestre de 2022.

Pidió a los países realizar una inversión significativa en sistemas sanitarios resilientes, fundados en la atención primaria de la salud, y cuyo objetivo sea la cobertura sanitaria universal.

«2022 debe ser el año en que acabemos con la pandemia. Pero también debe ser el año en que todos los países inviertan en la prevención de una futura catástrofe de esta magnitud y en acelerar los esfuerzos para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible».

Inclusive antes de la pandemia, dijo, mil millones de personas destinaban el 10% del gasto familiar en atención de salud; lamentó que cuando las personas no pueden acceder o pagar los servicios que necesitan se pone en riesgo a individuos, familias, comunidades y sociedades enteras.

En su mensaje de fin de año, agradeció a los trabajadores sanitarios de todo el mundo, así como a los científicos, investigadores y expertos en salud pública que continúan estudiando el virus, y desarrollando nuevas herramientas para combatirlo.

«Para el próximo año, la OMS se compromete a hacer todo lo que esté a su alcance para poner fin a la pandemia, e iniciar una nueva era en la cual la salud esté en el centro de los planes de desarrollo de todos los países».

Dejar respuesta

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí