El incremento de los precios del gas LP y la gasolina obligó a los mexicanos a gastar 123.8 pesos adicionales por un cilindro de 20 kilos y un tanque lleno de 40 litros con gasolina Magna, un alza que por sí sola fue 6.6 veces más grande que el aumento al salario mínimo entre 2020 y 2021, que fue de 18.41 pesos.
Los precios del gas LP y la gasolina fueron una de las pesadillas inflacionarias del año pasado. Entre la última semana de 2020 y el mismo lapso del año pasado, el precio del gas doméstico se incrementó casi 10 por ciento, de acuerdo con datos de la Profeco.
El organismo que lidera Ricardo Sheffield señaló que el precio de un cilindro con 20 kilos se incrementó 37.4 pesos entre un año y otro.
El incremento en el precio del gas LP se mantuvo por encima de la inflación , que cerrará 2021 por encima de siete por ciento y que representa su punto más alto en 20 años, pese a que el gobierno federal lanzó durante la segunda mitad del año la empresa Gas Bienestar, que está en fase piloto en la capital del país.
Por otra parte, el valor de la gasolina Magna tuvo un incremento de doble dígito, según los datos presentados en las conferencias mañaneras del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Al cierre del año, el encarecimiento del combustible se ubicó en 11.72 por ciento anual, lo que implicó gastar 86.4 pesos más para llenar un tanque de 40 litros.
Al sumar el incremento en estos dos combustibles, los mexicanos tuvieron que pagar 123.8 pesos más al cierre del año anterior en relación con lo que gastaban en 2020.
De acuerdo con datos de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos, en 2020, el pago mínimo se ubicó en 123.22 pesos, mientras que para 2021 se estableció en 141.7 pesos.
Esto representó un alza de apenas 18.48 pesos en la mayor parte del territorio nacional, sin considerar la Zona Libre de la Frontera Norte.
Para este año, el aumento al Salario Mínimo se ubica en 41.17 pesos, según el organismo dependiente de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.
Sin embargo, el incremento a los pagos solo aplica para las personas que obtienen el sueldo más bajo, debido a que el objetivo es mejorar el poder adquisitivo de las personas que obtienen menos ingresos.
El aumento en el resto de los salarios dependerá directamente de las negociaciones entre la empresa y los trabajadores.
Además, durante 2020 y 2021 algunas compañías decidieron disminuir temporalmente los sueldos a sus trabajadores, para evitar despidos masivos, debido a la contingencia por el coronavirus.