Desde siempre existen premisas que no cambian: para que haya una pugna son necesarias cuando menos dos partes. El dicho conflicto tiene mínimo tres versiones, la de cada una de los actores antagónicos y una tercera, casi siempre oculta, que es la “objetiva” y generalmente verdadera. Conducirse con falsedad, ha sido un recurso justificado entre los diplomáticos y usado como estrategia propagandística casi siempre por los muy perversos[1] y si bien todo ello a final de cuenta concluye bien porque alguien –en el mundo actual suelen ser los periodistas de investigación- revela que es lo falso y que lo veraz. ¿Conocer lo auténtico descubre solo a los mentirosos? ¿La molestia contra el señor Assange fue por espionaje o por haber delatado el embuste de algunos líderes políticos?
La globalidad, convierte casi a cualquier tema de interés informativo en mundial. Por igual las conflagraciones en Europa del este –Ucrania–Rusia– que el aumento de homicidios –especialmente de periodistas o mujeres– en México o la súper bronca en un estadio de futbol de Querétaro. ¿Qué tienen en común estas tres informaciones? A reserva de mover el interés morboso de los ciudadanos para conocer motivaciones como es la exaltación de emociones diversas -el miedo entre otras- es interesante advertir si la cantidad de grupos manifestándose en favor o en contra de Rusia, mantienen su intensidad o migran hacia el reclamo de justicia y paz en los estadios de futbol.
Para quien auténticamente quiera evaluar el porqué de las diversas desavenencias, deberá tomar en cuenta también el origen de los combates. En el lejano continente sabemos ¿Cuántos habitantes de aquella lejana región son realmente ucranianos’ ¿Por qué es importante que el presidente actual haya sido un exitoso comediante de origen judío? ¿A qué se debe y a quien conviene esta “moda” de presidentes o primeros ministros populistas sin casi nada de experiencia política?
De la misma manera que es necesario sopesar, como el exceso del ejercicio del poder –lo cual incluye demasiado tiempo en la función- termina por molestar por igual a los gobernados, a las víctimas de la creciente separación de ricos y pobres o los sometidos que no siempre están dispuestos a esperar el turno que deciden los “de arriba” para mejorarlos. Así las cosas, la primera responsabilidad inherente a nuestro derecho a estar informado consiste en averiguar la veracidad de lo que se nos trasmite. La mayoría de la humanidad no está en el nivel del australiano que logra reunir los suficientes papeles que puedan revelar la verdad; pero si algo nos parece que no lo es, nos alejaremos de la mentira, averiguando o de plano lo ignoramos. Algo muy cercano a los habitantes de la ciudad de México es lo que está ocurriendo entre los funcionarios del ámbito central y los titulares de las alcaldías, sobre todo aquellas que no son afines a la ideología y metas de los primeros. ¿Es verdad que a ninguno le están otorgando recursos? ¿Se están financiando con préstamos o con parte de la extorsión de los líderes del comercio informal? Si alguna de estas premisas en la auténtica nuestro deber es ¿denunciarlo o acercarse la líder para orientarlo? Y dependiendo de nuestra cercanía es conveniente sopesar cual actitud es la más conveniente política, económica y socialmente: pelearse como están haciendo algunas mujeres de las alcaldías lejanas a MORENA o ser discreto como hacen otros que corren el riesgo de ser confundidos con cómplices de corrupción.
La seguridad de ofrecer realmente un cambio se puede aceptar, según aquellos que optan por mentir a partir de chantajes morales; lo hicieron quienes en 1929 provocaron tal crisis financiera que algunos hasta se suicidaron y parece haber mucha similitud con fenómenos actuales como el incierto destino del euro, la crisis de gobernanza internacional con todo y los manipulables populistas que no entiende cómo o porque llegaron ahí. ¿A quién convenía que el asunto de Ucrania –Rusia sea apagado por el de las porras del futbol? De verdad nadie sabía hasta hoy todos los tejemanejes de pandillas que igual vandalizan un deporte que hospitales, negocios de todo tipo destinados a morir luego de que los rateros se roban desde cable, sanitarios, puertas o ventanas y hasta plantas de electricidad, sin que nadie le dé seguimiento a las denuncias?[2]
El impresionante aumento en delitos que no se persiguen y que dan base a la impunidad parece ser el tema por el cual pasarán a segundo término las desavenencias que afectan la federación rusa ¿Quién gana con ellos? ¿alguien sabe cómo será el arreglo? ¿Cuánto vale el mercado de gas y petróleo de Rusia? ¿Es más importante que la quiebra provocada en Chiapas a empresarios del café? ¿A quiénes de estos vándalos se les pagó para desmantelar un hospital privado sostenido por voluntarios de una ONG? ¿A dónde fueron a dar los equipos robados?
Y ya sin muertos después de una competencia futbolera, autoridades mexicanas podrán ir ra a Europa para traer negocios y fuentes de empleo a nuestro país. ¿está de acuerdo el presidente?, importa que sean de distintos partidos? Usted por lo pronto trate de estar bien informado.
[1] Una mentira repetida mil veces se convierte en verdad. Joseph Goebbels
[2] En Querétaro, los jóvenes adscritos a las fiscalías, son muy amables, toman nota de los hechos e los delincuentes que las policías presentan, pero al final del día, son liberados y siguen robando. ¿Es posibles que no sepan a donde fueron dar equipos de un hospital o enseres de un cortijo? Si empezaran por ahí los robos disminuirían, pero se trata de dejarlos “hacer”