En el reporte «Empleo se desacelera en junio, pero mantiene fortaleza», la institución indicó que las nuevas plazas laborales formales observan un crecimiento del 2,4 por ciento en el primer semestre del año, 0,2 puntos porcentuales encima del ritmo del crecimiento del mismo periodo del año 2022.
Pero solo en junio pasado, el empleo formal se registró un descenso mensual de 0,1 por ciento, 0,2 puntos porcentuales abajo de lo registrado en el mismo mes en los últimos dos años, con una variación neta de 24.000 empleos.
«Existen riesgos en el entorno económico y una probable desaceleración en la economía ligada al entorno económico de Estados Unidos para finales del año», explicó el reporte.
«Nuestra perspectiva de creación de empleo para cierre de año, consistente con el crecimiento esperado de la economía, es que muestre una tendencia de menor crecimiento durante los siguientes meses», añadió.
El indicador podría ganar tracción durante el tercer trimestre de forma transitoria, pero esto obedecerá a factores estacionales, dijo.
BBVA destacó que un elemento adicional que se puede aprovechar en los próximos años es el fenómeno de la relocalización de las cadenas globales de valor hacia México (nearshoring por su término en inglés), lo que podría dar un impulso extra al empleo.
La economía mexicana, la segunda mayor de América Latina después de Brasil, creció un 3,0 por ciento en el 2022, según cifras oficiales revisadas.
La Secretaría de Hacienda estima que la relocalización de cadenas de valor tiene el potencial de elevar el crecimiento económico local hasta en 1,2 puntos porcentuales para los próximos cuatro años.