México tiene uno de los niveles más altos de pobreza y desigualdad de ingresos entre los 38 países que conforman la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
En su informe anual sobre reformas estructurales, el organismo que dirige Mathias Cormann señaló que el índice de brecha de pobreza es 34.2, por encima del promedio de 28.7 puntos.
Lo anterior se deriva de que el sistema educativo se ha visto gravemente afectado por la pandemia y es probable que las desigualdades preexistentes se hayan ampliado aún más.
Además, a pesar de los recientes avances, la participación femenina en la fuerza laboral todavía está rezagada, ya que las responsabilidades de cuidado recaen desproporcionadamente en las mujeres.
Por ello, se requieren esfuerzos continuos para fortalecer la protección social, en particular haciéndola más eficiente y receptiva a los ciclos económicos, para reducir las brechas de género y mejorar la educación.
En el documento, la OCDE propone establecer un plan federal de seguro de desempleo, así como una red de guarderías, dando prioridad a los hogares de bajos ingresos.
Además de implementar programas destinados a la reintegración escolar de quienes abandonaron los estudios durante la pandemia y brindar apoyo y tutoría específicos a quienes tienen dificultades de aprendizaje.
Otro problema que identificó el organismo fue que el 55% de los trabajadores es informal, lo que es causa y consecuencia de la baja productividad en México.
Es por ello que el organismo internacional consideró necesario fortalecer la competencia, incluso garantizando que la autoridad siga siendo independiente y cuente con los recursos adecuados, y reduciendo las cargas regulatorias.
RETOS DIGITALES Y AMBIENTALES
En materia digital, el organismo reconoce que México ha hecho esfuerzos para mejorar el acceso digital, aumentando el acceso a internet y la conectividad a través de banda ancha móvil.
Sin embargo, mencionó que el número de conexiones de banda ancha fija sigue siendo bajo y son más caras que en países pares.
Los datos revelan que el 66.2% de los hogares mexicanos tiene acceso a banda ancha en sus hogares, por debajo del promedio de la OCDE de 88.2% y muy alejado de los cinco mejores países evaluados, con un acceso de 98.5% en banda ancha en los hogares.
Ante esto, el organismo consideró necesario incrementar la competencia en el mercado de banda ancha fija facilitando la entrada de nuevos proveedores. Modificar los planes de estudio escolares para fortalecer la alfabetización digital desde una edad temprana y mejorar la capacidad digital de los docentes.
Además de apoyar a pequeñas empresas para incrementar su presencia online y crear incentivos para el uso de pagos digitales a través de reembolsos en efectivo, loterías patrocinadas por el gobierno o recompensas para los consumidores.
Finalmente, la OCDE consideró que se necesitan medidas políticas adicionales para cumplir los objetivos de mitigación y adaptación al cambio climático.
“El potencial del país en el sector de las energías renovables es alto, pero sigue sin explotar y la proporción de energías renovables en la combinación energética es menor que en la mayoría de los demás países de la OCDE”, señaló el organismo.
