No hay forma de cuantificar los daños en Acapulco ya que no hay luz, ni teléfonos ni internet, el huracán Otis entró con una fuerza inusitada y categoría 5, lo que nunca había sucedido en México y por si fuera poco se detectó un sismo de magnitud 5 al suroeste de Zihuatanejo.

A pesar de no tener información AMLO se atrevió a decir que hay «saldo blanco» en Guerrero y a pesar de que el huracán tocó tierra alrededor de las 00:25 horas con vientos de 270 kms/h, en la mañanera se informaba alrededor de la 9 am, que «se estaba viendo para que saliera la ayuda».

Hace unos minutos, alrededor de las 2 pm, en una entrevista transmitida en una estación de radio AMLO dice que va a Guerrero, a pesar de que todavía se encuentra cerrada la carretera y sin que desde la oficina de Comunicación de la presidencia se confirme el dato. La falta de transparencia siempre está presente en esta administración.

También el aeropuerto de Acapulco se encuentra cerrado por la inundación y destrozos debidos a la fuerza del huracán.

Empresarios turísticos lamentan la desaparición del Fonden, ya que ahora  es cuando más se necesita el apoyo para la población.

Medios internacionales también dan cuenta del desastre.

Sky Alkert anuncio que están desconectados del servicio sísmico en la mayor parte de Guerrero por la magnitud de las afectaciones.

 

A cuenta gotas se reciben algunas imágenes y videos de las zona turística de Acapulco:

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