SAS ha detectado que, en México, 8 de cada 10 compañías financieras solicitan información sobre riesgo financiero relacionado con el cambio climático y demás temas ambientales y sociales
La firma especializada en Inteligencia Artificial y Analítica avanzada de datos, SAS, señala que, la crisis hídrica en México impactará directamente en las decisiones estratégicas del sector empresarial, así como en las instituciones financieras durante los siguientes seis años.
En este sentido, las empresas que puedan tener medición de los riesgos y tomar decisiones estratégicas basadas en análisis de datos, generarán mayor confianza en los mercados ante los distintos escenarios resultantes del cambio climático, como lo es el estrés hídrico. Lo anterior, se reflejará en un menor riesgo para las carteras crediticias de las instituciones bancarias, ya que sus inversiones serán más inteligentes y estratégicas.
Naeem Siddiqi, Senior Advisor, Risk and Quantitative Research de SAS, compartió:
“Las instituciones financieras atraviesan por un momento complejo, marcado por una variedad de riesgos que abarcan el cambio climático, un factor que impacta a todos los sectores a corto y largo plazo. Sin embargo, este panorama también presenta importantes oportunidades para aquellas entidades que se adapten y aborden proactivamente estos desafíos.
Por su parte, Luis Barrientos, Risk Domain Expert en SAS México, comentó al respecto:
“Las herramientas de inteligencia artificial basadas en analítica avanzada de datos son capaces de predecir escenarios y cruzar silos de información con el objetivo de calcular los posibles riesgos de una inversión o de un préstamo, lo cual ayuda en la toma de decisiones; pero también puede ser favorable para comprender y encontrar posibles soluciones a los problemas medioambientales actuales”.
Una investigación del World Resources Institute (WRI) reveló que, 75 países (incluido México y Costa Rica) podrían alcanzar una gestión sostenible del agua hacia 2030 con solo un 2% o menos de su Producto Interno Bruto (PIB) anual. Por otra parte, datos del Banco Mundial indican que, la falta de políticas eficientes de gestión del agua podría reducir el PIB de algunas regiones hasta el 6% para el año 2050. De acuerdo con estimaciones de Aqueduct, el 31% del PIB mundial estará expuesto a un “alto estrés hídrico” para 2050; y México es uno de los cuatro países que representan más del 50% de este PIB proyectado.
Asimismo, en México las altas temperaturas y la crisis hídrica se han convertido en problemas cada vez más alarmantes; con implicaciones directas para individuos, empresas, instituciones financieras y gobiernos. Durante la tercera ola de calor de junio de 2023, se registraron temperaturas récord en varias zonas del país. Datos del Servicio Meteorológico Nacional de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) indican que, la temperatura promedio de ese mes, 38.4 grados Celsius, fue la más alta en comparación con años anteriores.
En este contexto, es cada vez más relevante para el sector empresarial y financiero las condiciones climatológicas de los lugares en los que invierten; así como las acciones que toman las compañías para hacer frente al cambio climático. En este apartado, SAS -con información de la CNBV, Banxico e INEGI-, ha detectado que, en México, 8 de cada 10 compañías financieras solicitan información sobre riesgo financiero relacionado con el cambio climático y demás temas ambientales y sociales.
“Aunque la demanda de productos derivados del petróleo continúa, se observa como tendencia a futuro que se implementen políticas más rígidas por parte de las instituciones financieras y los inversionistas para disminuir la apuesta por este tipo de recursos.
Entonces, las fuentes de ingresos de este mercado se comenzarán a agotar. Algunas compañías tendrán boicots y se puede generar una escasez, lo cual traerá consigo una pronunciada alza de los precios que impactará directamente en los créditos; ya que, al aumentar el riesgo, se elevarán las tasas de interés”, puntualizó Naeem.
Criterios ESG y su relevancia en materia medioambiental
Es cada vez más común que las empresas implementen criterios ESG (Environmental, Social and Governance), los cuales son factores que se tienen en cuenta para invertir en una empresa. Aunque actualmente no existe una estandarización en la medida de estos criterios, hay 35 agencias que califican los ESG y cómo son adaptados internacionalmente para crear un estándar. Por ejemplo, en la banca europea se consideran bastante los criterios para otorgar créditos y evaluar su reputación.
“Una encuesta de IBM reveló que el 58% de los negocios piensan que el ESG es una oportunidad de negocio. En Estados Unidos, esto se ha politizado un poco, en diferentes estados como Texas, Florida y Iowa existen inversiones de fondos para ESG en la toma de decisiones”, indicó Naeem.
Aunque la implementación de los criterios está en vías de convertirse obligatorios a nivel gubernamental, los gobiernos mundiales están impulsando su adopción con un enfoque ambiental. Ahora todos los países que firmaron el Acuerdo de París están comprometidos con alcanzar el objetivo Net Zero.
“Pero, por otro lado, y con un gran peso, está el tema de la reputación y el sentimiento de las personas frente a la implementación y cumplimiento de los criterios ESG de las compañías en las que invierten los bancos que, de no ser aceptables, puede desencadenar en un boicot o en una mala reputación.
Ninguna institución bancaria querrá que la asocien con empresas que se arriesgan y tienen acciones en contra del medio ambiente, sus colaboradores o la niñez, por mencionar algunas”, advirtió Naeem.
En un futuro no muy lejano, los criterios ESG tendrán mayor relevancia e incrementarán el número de multas para compañías que concedan préstamos a empresas que no sean responsables con el manejo de los recursos o sean altamente contaminantes.