A pesar de un contexto nacional e internacional marcado por la incertidumbre, los líderes empresariales en México mantienen una visión optimista para el 2025. Sin embargo, esta confianza se sustenta en una estrategia de adaptación constante a los cambios y desafíos del entorno.
Según el estudio “Perspectivas de la Alta Dirección en México 2025”, realizado por KPMG, las empresas mexicanas han aprendido de las crisis pasadas y están diseñando planes de negocio más resilientes. Si bien un 56% de los directivos encuestados prevé un estancamiento económico para este año, el 80% confía en un aumento de sus ventas.
Los Retos de la Economía Mexicana
El estudio identifica varios desafíos que podrían frenar el crecimiento económico:
- Inseguridad: El 45% de los directivos considera que la inseguridad es el principal factor que afecta sus operaciones, impactando márgenes de ganancia y la percepción de riesgo del país.
- Atracción y retención del talento: La competencia por el talento calificado es cada vez más intensa, lo que obliga a las empresas a invertir en capacitación y desarrollo.
- Desaceleración del consumo interno: La contracción del poder adquisitivo de los consumidores representa un obstáculo para el crecimiento de ciertos sectores.
- Transición de gobierno: Los cambios políticos pueden generar incertidumbre y afectar las decisiones de inversión.
- Fluctuaciones del tipo de cambio: La volatilidad del peso frente al dólar impacta los costos de producción y la competitividad de las empresas exportadoras.
La Importancia de la Adaptación y la Innovación
Ante este panorama complejo, las empresas están priorizando las siguientes estrategias:
- Digitalización: La adopción de tecnologías digitales es fundamental para optimizar procesos, mejorar la eficiencia y crear nuevos modelos de negocio.
- Innovación: La inversión en investigación y desarrollo es clave para desarrollar productos y servicios diferenciados que satisfagan las necesidades cambiantes de los consumidores.
- Sostenibilidad: Los temas ambientales, sociales y de gobernanza corporativa (ASG) están cobrando cada vez más relevancia, y las empresas deben demostrar su compromiso con la sostenibilidad.
- Gestión del talento: La atracción, desarrollo y retención del talento es un factor crítico para el éxito empresarial.
- Resiliencia: Las empresas deben construir organizaciones más resilientes capaces de adaptarse rápidamente a los cambios del entorno.
Los líderes empresariales esperan que el gobierno desempeñe un papel fundamental en la creación de un entorno favorable para los negocios, a través de:
- Fortalecimiento del Estado de derecho: Un marco legal sólido y confiable es esencial para atraer inversión y promover el crecimiento económico.
- Sostenibilidad de las finanzas públicas: Una política fiscal responsable es fundamental para garantizar la estabilidad macroeconómica.
- Fomento de la inversión privada: El gobierno debe implementar políticas que incentiven la inversión nacional y extranjera.
- Desarrollo de infraestructura: La inversión en infraestructura es clave para mejorar la conectividad y la competitividad del país.
El futuro de la economía mexicana dependerá en gran medida de la capacidad de las empresas para adaptarse a un entorno cada vez más dinámico y complejo. Los líderes empresariales deben adoptar una visión a largo plazo, invertir en innovación y talento, y colaborar con el gobierno para crear un entorno favorable para los negocios.