La administración del presidente estadounidense, Donald Trump, podría estar, con su política comercial, en medio de un gran y dudoso experimento económico, consideran expertos citados por The New York Times (NYT).
Aunque en estos momentos, el plan del mandatario norteamericano pudiera parecer una victoria política, los analistas y especialistas expresan serias dudas sobre si ello será un éxito económico.
Washington impuso los aranceles más altos desde principios del siglo XX, pero esa medida más bien se utilizaba por los países pobres para defender a los productores nacionales y no precisamente por gigantes industriales como Estados Unidos, destaca NYT.
La fórmula parece errada
El exfuncionario y fundador del Instituto de Estrategia Económica, Claide Prestovits, indicó que ahora la situación en Estados Unidos es similar a la época anterior a 1946, cuando los gobiernos sostenían una política mercantil de uso del proteccionismo para acumular riqueza.
Tal estrategia dio resultados a Reino Unido, Estados Unidos, Francia, Alemania, Japón y otros que pudieron hacerse rico, recordó el experto.
“Pero muchos economistas advierten que las tarifas de finalmente llevarán a una desaceleración del crecimiento de la economía y en parte retardarán los esfuerzos para estimular la producción”.
Trump
Extraña sensación de cambio
El economista Bred Setser considera que un cambio sustancial en la política lo percibirá la mayoría de los estadounidenses, pues los aranceles son altos y pueden frenar la economía.
Las tarifas a ese nivel llevarán a un aumento de los precios, tanto para las compañías que importan los productos, como para los consumidores norteamericanos que los compran, aclaró.
Los aranceles
El 2 de abril, Trump anunció aranceles por encima del 10 por ciento para 185 países y territorios. Aunque el 9 de abril anunció una suspensión de esas medidas por 90 días, entró en una guerra comercial hasta pactar un acuerdo con Beijing en julio.
Sin embargo, un gigante de la industria automotriz como General Motors reportó pérdidas por mil 100 millones de dólares en el segundo trimestre de este año y espera un impacto anual de entre cuatro mil y cinco mil millones, señala Reuters.
Tesla, aunque produce vehículos en Estados Unidos, también reportó costos significativos de unos 300 millones de dólares en un trimestre debido al uso de componentes importados, señala Business Insider.
Empresas tecnológicas de la Bahía de San Francisco (como Apple, Nvidia, Meta) vieron una caída combinada en capitalización de mercado superior al billón 100 mil millones de dólares, de los cuales Apple, Nvidia y Meta sumaron cerca de 653 mil millones en pérdidas en apenas dos días, destaca la misma fuente.