La inflación anual en México aceleró por tercer mes consecutivo en mayo, presionada nuevamente por los rubros de servicios y de agropecuarios, cuyos precios son más volátiles y podrían estar resintiendo el impacto de la sequía en el país.
Con un avance de 4.69% a tasa anual, los precios al consumidor alcanzaron su segundo mayor nivel de los últimos 11 meses, solo por debajo de la tasa de 4.88% registrada en enero, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
Así mismo, la inflación en el país retrocedió 0.19% mensual en mayo y anotó su segundo mayor descenso para un periodo similar en los últimos cinco años, dijo el instituto.
Los productos que más presionaron los precios al consumidor a la baja fueron la electricidad, con un descenso mensual de 21.45% por los subsidios que otorga el gobierno en una parte del país por las altas temperaturas, seguida de la cebolla con una caída de 25.14% mensual, el gas doméstico LP con 3.11% y el tomate verde con 10.75%, entre otros.
Por el contrario, parte de este comportamiento fue contrarrestado por las alzas de 11.09% en el jitomate, de 4.72% en el huevo, de 0.37% en la vivienda propia y de 22.49% en el chile serrano, entre otros.
El incremento de los precios al consumidor quedó por debajo del descenso de 0.09% mensual y del incremento de 4.84% año a año que esperaban los analistas encuestados por Infosel.
Para los economistas del sector privado, el desempeño de los precios por debajo de las expectativas puede ayudar a que se materialice un recorte a la tasa de referencia nacional el próximo 27 de junio, pese al repunte de los precios observado en los últimos meses.
La tasa objetivo de Banco de México se ubica actualmente en 11%, después de que la Junta de Gobierno aplicó un primer recorte de 25 puntos base en marzo. Algunos funcionarios del Instituto Central dijeron que están abiertos a valorar un nuevo recorte en la próxima reunión, pero otros consideran que no es apropiado por las presiones actuales y que incluso el ajuste de hace tres meses fue prematuro.
El índice de precios al consumidor está actualmente casi dos puntos porcentuales arriba del objetivo que persigue el banco central (3%) y su expectativa es que cierre el año en una tasa anual de 4%, o en el límite del rango de tolerancia permitido por las autoridades.
“El próximo dato de inflación para la primera quincena de junio se dará a conocer el 24 de junio, en la antesala del anuncio de política monetaria de Banco de México”, escribieron analistas de Intercam Banco, en una entrada de blog. “Si nuevamente sorprende a la baja, no descartamos que pudieran llevar a cabo un recorte en la tasa de fondeo”.
Por su parte, el componente subyacente de los precios, o aquella medida que excluye los cambios en productos altamente volátiles, como energéticos y agropecuarios, aumentó 0.17% mes a mes y avanzó 4.21% frente a mayo de 2023.
El desempeño de los precios subyacentes resultó igualmente inferior al pronóstico de los analistas encuestados, que anticipaban un alza mensual de 0.25% y un avance anual de 4.29%.
Hace un año, en mayo de 2023, los precios al consumidor bajaron 0.22% mes a mes y crecieron 5.84% año a año.