El gobierno del presidente Donald Trump, México y demócratas estadounidenses se acercaron el lunes a alcanzar un acuerdo en materia laboral con lo que se podría destrabar el proceso para que la Cámara de Representantes vote en corto plazo un renovado tratado comercial que incluye a Canadá.
El representante comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer, y el principal asesor de la Casa Blanca, Jared Kushner, viajarán a Ciudad de México el martes para afinar detalles finales del convenio, dijo un funcionario de la administración de Trump a Reuters el lunes por la tarde.
Asesores del Congreso estadounidense e industriales dijeron que se envió un acuerdo propuesto a la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, quien tomará la decisión final sobre cuándo someter a votación el nuevo pacto comercial conocido en español como T-MEC.
«Estamos estudiando la propuesta», dijo a Reuters un asesor de alto rango, quien agregó que por el momento no había un acuerdo para anunciar.
Más tarde un portavoz de la viceprimer ministra de Canadá, Chrystia Freeland, dijo que la funcionaria viajaría el martes a Ciudad de México para sostener reuniones enfocadas en el tema.
El T-MEC reemplazaría al añejo Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), vigente desde hace 26 años.
El acuerdo debe ser aprobado por legisladores de los tres países pero hasta ahora, en Estados Unidos, los demócratas han sido reacios para realizar una votación que otorgaría una victoria política al presidente republicano Trump.
El tiempo se acaba para una votación antes de fin de año
Legisladores de ambos partidos han dicho que esperar hasta el próximo año para votar el acuerdo podría dificultar la ratificación porque se empataría con los tiempos de la campaña presidencial y quizá a los procesos de juicio político contra el presidente Trump.
Muchos en el Capitolio se mostraron reacios para dar declaraciones sobre si se había llegado a un acuerdo.
Líderes de los tres países firmaron un acuerdo inicial hace más de un año, desde entonces los demócratas que controlan la Cámara han presionado por cambios para fortalecer la aplicación de nuevas leyes laborales y relajar la protección de datos para medicamentos biológicos, que podría generar aumento en precios.
Lighthizer pidió recientemente una definición más estricta de lo que constituiría el acero y aluminio de América del Norte, según las normas de origen automotriz, y ha solicitado que el acero se «derrita y vierta» en la región, según fuentes de la industria familiarizadas con la demanda.
Las reglas de origen automotriz exigen hasta ahora que el 70% del valor del acero y el aluminio utilizados en los automóviles fabricados en Norteamérica provenga de la región.
Trump, quien afirmó durante su campaña en 2016 que el TLCAN provocó la pérdida de millones de empleos en fábricas estadounidenses y prometió renunciar a él o a renegociarlo, dijo el lunes que «se han hecho muchos avances en las últimas 24 horas».
«Escucho cosas muy buenas. Escucho de los sindicatos y otros que se ve bien», dijo a periodistas en la Casa Blanca. Previamente el mandatario habló con el jefe del sindicato AFL-CIO, Richard Trumka, sobre las negociaciones, dijo una persona con conocimiento de la llamada.
Trumka, uno de los líderes laborales más poderosos de Estados Unidos, ha sido una pieza importante en las negociaciones y ha presionando por lograr leyes más estrictas en el sector laboral que garanticen la sindicalización de trabajadores mexicanos.
El líder de los trabajadores dijo previamente a Washington Post que su comité ejecutivo estaba revisando el acuerdo. «Los hemos empujado con fuerza y lo hemos hecho bastante bien», afirmó.
Cerca de un acuerdo
El mandatario Andrés Manuel López Obrador afirmó el lunes que el Senado mexicano aceptó avalar modificaciones al nuevo tratado comercial entre Canadá, Estados Unidos y México (T-MEC), mientras que funcionarios aseguraron el fin de semana que negociadores mexicanos y de Washington se estaban acercando a lograr un acuerdo para ratificarlo.
«Es el tiempo adecuado, conveniente. La política también es tiempo, es el momento de tomar ya la decisión», dijo en su conferencia de prensa matutina.
«Que se decida sobre este tema, ya nosotros hemos cumplido cabalmente y consideramos que es un buen acuerdo para nuestras naciones», pidió el mandatario a Pelosi.
En tanto, la Coparmex, una de las organizaciones empresariales más importantes de México, pidió el lunes al Senado local no apresurarse a dar luz verde a modificaciones «que contradigan» los acuerdos originales aprobados por los tres países.
«México no tiene que correr ningún riesgo en materia comercial, ni supeditar los acuerdos a las coyunturas internas que ocurren en otros países», dijo Coparmex en un comunicado. «No tenemos prisa», añadió.