Las remesas a México, una de las principales fuentes de divisas del país, descendieron levemente en julio, arrastradas por un menor monto promedio de los envíos que opacó un incremento en el número de transacciones, según cifras divulgadas el lunes por el Banco de México.
Los capitales recibidos sumaron 5,614 millones de dólares, un 1% menos que durante el mismo mes de 2023, de acuerdo con un reporte mensual del Banco de México. En junio las remesas alcanzaron un récord histórico de 6,207 millones de dólares.
El número de operaciones -provenientes principalmente de Estados Unidos– aumentó en el periodo un 0.8% interanual, a 13.9 millones de transacciones. No obstante, el monto promedio por envío decreció un 1.8% a 402 dólares.
En cifras acumuladas, las remesas se incrementaron un 2.9% interanual entre enero y julio a 36,940 millones de dólares, dijo el banco central.
Las remesas comenzaron a crecer al comienzo de la pandemia de covid-19, en marzo de 2020, y suponen la principal fuente de ingresos externos para el país, que recibió un récord de 63.313 millones de dólares en 2023, un aumento del 7.6% respecto a 2022 y el décimo incremento anual consecutivo.
El presidente Andrés Manuel López Obrador agradeció el domingo, en su último Informe de Gobierno, a los casi 40 millones de mexicanos que hay en Estados Unidos, de quienes provienen la mayoría de los aportes, y a quienes considera “héroes” por estimar que benefician a cerca de 12 millones de familias.
México es el segundo mayor receptor de remesas del mundo, solo detrás de India, según el Banco Mundial.
El BBVA estimó en agosto que México recibirá un récord de 66,500 millones de dólares en 2024, cuando representarán el 3.7% del producto interior bruto (PIB).
