Sin duda, la relación bilateral entre Estados  Unidos y es sumamente compleja, con aristas en lo económico, político y  social, y ha estado marcada por la ideología de cada en ambos lados de la  frontera. La migración y el comercio son algunos de los temas más importantes que se ponen sobre la mesa en las nego iaciones; sin embargo, existen otros que  han tomado relevancia y trascendencia,  especialmente en los últimos años: el nar cotráfico y la política energética. 

En el ámbito energético, la frontera  compartida, asentada sobre importantes  yacimientos de hidrocarburos, ha sido un factor clave en la configuración de una relación histórica de interdependencia  entre ambas naciones. El ha sido tanto o más importante que  el comercio de bienes, relación en la que  influyen de manera destacada las asimetrías geológicas, y que ha generado dependencias desfavorables para nuestro país. 

El futuro de la política energética pasa  en estos momentos por un singular momento, sobre todo considerando las acciones propuestas por el recién reinaugurado gobierno estadounidense que  dejará de lado las energías renovables.  Se retomará el rechazo al y se reducirán regulaciones ambientales, privilegiando, como en su primer mandato, la producción de combustibles  fósiles (gas y ), lo que sin duda  impactará al mercado energético mundial y al binacional. 

Esta situación sería un arma de doble  filo para México. Por un lado, se podría  acceder a gas más barato, lo que apoyaría  la reconversión hacia esta fuente más eficiente que el combustóleo. Pero, por otro  lado, se incrementaría la dependencia del  gas y ahora del petróleo ante la menor exportación anunciada lo que daría herramientas al gobierno norteamericano  para presionar en negociaciones sobre otros temas de la agenda binacional. El  tema energético será preponderante en  la próxima revisión del T-MEC; ante esto  contamos con pocas ventajas. 

Los son el principal  productor mundial de gas natural, repre sentando el 25% del total (1,035 billones  de m³) y de petróleo crudo, aportando el  20% del mercado (13 millones de barri les diarios). México, si bien posee yaci mientos, no es competitivo; por lo tanto,  depende grandemente de la importación  de gas y sus reservas petroleras probadas  están en franco declive. Esto hace nece sario acelerar la transición hacia fuentes  renovables si no queremos seguir atrapa dos en una trampa energética. 

La infraestructura desarrollada en tre ambos países ha facilitado el comercio energético, con un significati vo intercambio de petróleo, gas natural y electricidad, especialmente a través  de la frontera. México ha provisto du rante años petróleo crudo a EE.UU.;  sin embargo, el volumen exportado ha  disminuido, lo que ha llevado a perder posición en el mercado norteamerica no, pasando del 28% en 2023 al 18% en  2024. Esto se debe en parte a la política de reservar la producción nacional para el sistema de refinación, buscando la  autosuficiencia energética. 

Por su parte, México depende significativamente de las importaciones de productos refinados estadounidenses  como y diésel; en adición, es el  principal comprador de gas natural de  Estados Unidos, estableciendo en 2024  un récord de 6,537 millones de pies cú bicos diarios (mmpcd), según datos de  la EIA. La expansión de los gasoductos  transfronterizos ha permitido a México satisfacer su creciente demanda de gas natural destinado a la producción industrial y a la generación de energía eléctri ca; siendo este hidrocarburo el principal  combustible utilizado. 

La evidente dependencia de México  respecto a las fuentes externas de energía requiere de acciones firmes, si bien nuestro país está dando señales iniciales  hacia energías más limpias, el proceso  requiere acelerarse. La política energética bajo la rectoría del Estado es viable  si se concreta una mayor apertura a la  inversión privada; es crucial ampliar la  infraestructura de transporte y alma cenamiento, incrementar la producción  nacional y dejar atrás ideologías obsoletas. A ponerse las pilas. 

El autor es presidente de Consultores  Internacionales, S.C.® 

Dejar respuesta

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí