A punto de que concluya 2025, la elevada incertidumbre en la política comercial y la débil demanda seguirán afectando el crecimiento hasta que concluya la revisión del T-MEC a mediados de 2026, anticipó en un análisis, Morgan Stanley.
Según el banco, la inflación debería mantenerse cerca del límite superior del rango objetivo, ya que los nuevos aranceles y los impuestos aumentan la presión sobre los costos, lo que limita el margen de maniobra de Banxico para una mayor flexibilización.
A punto de que concluya 2025, la elevada incertidumbre en la política comercial y la débil demanda seguirán afectando el crecimiento hasta que concluya la revisión del T-MEC a mediados de 2026, anticipó en un análisis, Morgan Stanley.
Según el banco, la inflación debería mantenerse cerca del límite superior del rango objetivo, ya que los nuevos aranceles y los impuestos aumentan la presión sobre los costos, lo que limita el margen de maniobra de Banxico para una mayor flexibilización.
Además, la consolidación fiscal sigue siendo lenta ante las mayores necesidades de gasto.
De acuerdo con el banco, la situación de México mejorará después de la revisión del T-MEC; pues dicho acuerdo solamente contará con mínimos ajustes y no habrá aranceles para el sector automotriz.
De tal forma que México seguiría estando relativamente bien posicionado para exportar productos manufacturados a Estados Unidos.
Lo cual, junto con el repunte de la actividad estadunidense previsto para la segunda mitad del próximo año, “crea un terreno fértil para una recuperación impulsada por la inversión”.
“Es probable que el repunte de la actividad comience gradualmente en el segundo semestre de 2026 y se haga más visible en 2027, cuando el crecimiento debería superar ligeramente el potencial tras dos años de desempeño moderado”.
Morgan Stanley explicó que el gasto público también debería contribuir gradualmente al crecimiento del PIB a medida que la inversión pública se recupere de los mínimos de 2025.
PRESIÓN DE PRECIOS
Morgan Stanley advirtió que los denominados “impuestos saludables” podrían generar aumentos en la inflación el próximo año.
“El contexto a medio plazo se tornará menos favorable, ya que los nuevos aranceles a las importaciones y los impuestos a la salud aumentarán las presiones sobre los precios”, dijo.
“Nuestras estimaciones preliminares sugieren que estas medidas podrían añadir en conjunto unos 60 puntos base a la inflación general”, reveló.
De tal forma que es probable que las empresas trasladen los mayores costos a los consumidores, por lo cual, los impuestos y los aranceles representan la mayor parte de las próximas presiones sobre los costos.
Según Morgan Stanley después del primer trimestre de 2026, Banxico tendrá un margen limitado para continuar con los recortes a la tasa de interés.
Lo anterior porque se materializarán los impuestos a los refrescos y los aranceles a las importaciones.
“Aunque técnicamente se trate de medidas puntuales, prevemos su persistencia, dado que involucran bienes intermedios (y la sustitución de importaciones lleva mucho tiempo, si es que llega a producirse) y bebidas azucaradas, cuyo consumo es muy elevado, especialmente con México como coanfitrión de la Copa Mundial de Futbol de la FIFA 2026”.




































