En el mundo hay ocho países en donde las tienen la misma posición legal que los hombres: Canadá, Dinamarca, Francia, Islandia, Letonia, Luxemburgo y Suecia obtuvieron un puntaje de 100 puntos al evaluar los ocho indicadores del índice.

Al evaluar la igualdad legal de las mujeres y los hombres en la movilidad, lugar de trabajo, salario, matrimonio, paternidad, emprendimiento, activos y pensión, el puntaje global promedio de las 190 economías analizadas en la edición 2020 del índice fue de 75.2 puntos, desde 73.9 puntos en 2017.

obtuvo 83.8 puntos, mejor que el promedio mundial pero debajo de los 86.25 puntos del año anterior. obtuvo 91.3 puntos.

Los países de América Latina en donde el puntaje indica una mayor paridad legal entre hombres y mujeres fueron Perú y Paraguay -95 y 94.4 puntos-; Brasil y Colombia tuvieron 81.9 puntos cada uno.

El índice hace un seguimiento de cómo las leyes afectan a la mujer en diferentes etapas de su vida laboral, tomando en cuenta las leyes aplicables a la principal ciudad de negocios. El estudio cubre diferentes reformas realizadas desde junio de 2017 hasta septiembre de 2019 en ocho áreas asociadas con el empoderamiento económico de la mujer.

“Los derechos legales de la mujer son lo correcto y lo favorable desde una perspectiva económica. Cuando las mujeres logran movilizarse con mayor libertad, trabajar fuera del hogar y administrar activos, es más probable que se unan a la fuerza laboral y ayuden a fortalecer la economía de su país”, señaló el presidente del Banco Mundial, David Malpass, en la presentación del reporte en Washington, D.C.

Los ocho indicadores, estructurados en torno a las interacciones de las mujeres con la ley a medida que comienzan, progresan y finalizan sus carreras, se alinean con las decisiones económicas que toman en diversas etapas de sus vidas, y señalan que un mejor desempeño en las áreas medidas por el índice de ‘Mujeres, Negocios y Derecho’ se asocia con más mujeres en la fuerza laboral y con mayores ingresos y mejores resultados de desarrollo.

A nivel global, las mayores diferencias legales para hombres y mujeres radican en la paternidad, la paga y las pensiones.

En México, las más grandes diferencias son en los rubros de matrimonio y paternidad, en cada uno el marcaje obtenido fue de 60 puntos. Se observa un retroceso desde los 80 puntos en matrimonio, en donde se miden los contratos legales relacionados al matrimonio, el divorcio y la vigilancia de la violencia doméstica con daños emocionales y físicos con legislación explícita para evitarla con sanciones u órdenes de protección.

El indicador de paternidad examina leyes que afectan el trabajo de las mujeres durante y después del embarazo. Si se paga el permiso de maternidad o de paternidad o una combinación de ambos y si se discrimina a trabajadoras embarazadas.

Los otros dos indicadores en donde México mostró que puede mejorar son en la paga a las mujeres y el tema de pensiones, en cada uno obtuvo 75 puntos, la misma puntuación respecto al año anterior.

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